BIOGRAFÍA

En el año 1937, en pleno desarrollo de la Guerra Civil Española, nace Jose Ramón Sierra Peña, natural de San Cibrao das Viñas, municipio de la provincia de Ourense.

Desde muy niño tuvo una gran vocación musical. Siempre quiso ser músico, aunque no existían antecedentes musicales en su familia ni en su entorno. Esto era algo poco usual para la época, ya que no había televisión en los hogares y apenas había radios y por tanto no había un acceso directo a la música. El propio Jose Ramón Sierra cuenta que su vocación nació viendo a otros músicos tocar en fiestas cercanas a su pueblo en las que podía escuchar, en ocasiones, a alguna banda de música y también escuchando la radio en casa de algún conocido de su pueblo que tenía la suerte de tener una propia. Cada vez que una banda tocaba en un lugar cercano él no perdía la oportunidad para ir a verla y estaba muy atento durante todo el concierto.

Su familia siempre vio con buenos ojos esa vocación musical ya que su pueblo vivía básicamente de la agricultura y ser músico conllevaba un mayor nivel de vida, así que siempre apoyaron sus estudios musicales. A la edad de ocho años comenzó su carrera musical,  como no había escuelas de música ni conservatorios cercanos a su pueblo comenzó a estudiar música con los músicos más destacados de la zona, que le fueron enseñando el solfeo y como instrumento comenzó a tocar el clarinete. Para esto, se desplazaba a la villa de Allariz, a unos quince kilómetros de distancia de su pueblo, ya que en este pueblo había una banda de música y en ella había músicos que impartían clases. Este recorrido lo hacía a pie y le llevaba unas tres horas el camino de ida y otras tres horas el de vuelta. Esos años fueron muy duros para él pero la gran vocación musical que tenía desde muy niño le animó a seguir hacia delante con su carrera.

Sus primeros estudios de clarinete y solfeo los recibió de Joaquín Sánchez, clarinetista, que dirigió varias bandas de música y que en aquel momento era el director de la Banda Municipal de Música de Allariz. Más tarde, Jose Ramón, comenzó a tocar en la Banda de Música de Allariz. Durante los años que estuvo en la formación, adquirió una técnica que más adelante le valió de mucho.  Fue miembro de la banda hasta los catorce años, el año 1951.

En el año 1951, el Circo Mexicano, que llevaba un empresario valenciano, llegó a Orense. En este circo había una pequeña orquesta y Jose Ramón entró a formar parte de ésta como clarinetista. Así a la edad de catorce años comenzó una nueva vida para él yendo de gira con este circo. Por primera vez salió de Galicia y fue de gira por España y por el norte de África. Esto fue un gran impacto, para él era otro mundo, ya que salía de una aldea en la que no había apenas radios ni televisores para ir a lugares en los que había de todo. Le llamaron especialmente la atención lasgrandes ciudades, que tenían grandes carreteras y, también durante este tiempo, conoció los “supermercados”, grandes comercios, donde podía coger todas las cosas que quería comprar y pagar cómodamente al final, cosa que le llamó mucho la atención y que no había visto nunca antes, ya que en su pueblo todo se lo servía un tendero y no podía tocar los artículos hasta haberlos pagado.

Cuenta, que fue en estos viajes en los que compró sus primeros instrumentos, un clarinete, un violín y un saxofón, y una bicicleta. Además aprendió un nuevo idioma, el francés, que era el idioma que utilizaban en sus viajes al extranjero.En el circo tocaban música para acompañar los diferentes números de cada artista e incluso tenían algún número en el que salían a escena para acompañar a alguna bailarina. Estuvo en el circo durante dos años y fue para él una gran experiencia que le abrió los ojos al mundo y en la que aprendió un montón de cosas nuevas, tanto en lo musical como en lo personal.

A los dieciséis años decide dejar el circo, y es en ese momento en el que decide trasladarse a la ciudad de A Coruña. Una vez allí tarda unos dos meses en instalarse y cuando está bien instalado lo contratan en una pequeña orquesta llamada “Ases del Jazz”. Este sería su trabajo hasta que lo llaman a filas.

A los diecinueve años comienza su servicio militar y allí entra a formar parte de la Banda Militar ya que su deseo era convertirse en músico militar. Para entrar en esta agrupación tiene que firmar un convenio de tres años de duración para hacer el servicio militar, que en principio le parece bien ya que él tenía la intención de dedicarse plenamente a ser músico militar. Durante este tiempo estudia a fondo para poder optar al rango de sargento o de brigada que es a lo que él aspiraba, pero no tiene suerte y durante esos tres años no hay posibilidad de opositar. Paralelamente sigue tocando en orquestas, por aquel entonces estaba con la orquesta Los Satélites, y ambos trabajos eran compatibles. Pero entonces, la banda militar dejó de ser compatible con otros trabajos y además, como ya casi habían pasado los tres años de servicio militar y no había habido oposiciones, debía firmar otro convenio en el que se comprometía a estar otro año más en el ejército. Por cuestiones económicas él no quería pasar otro año más en el ejército así que un amigo cercano le recomendó que se licenciara como cabo, músico de tercera, y así podría irse al terminar los tres años de servicio.

Una vez fuera del ejército decide que debe validar sus estudios musicales. Él ha estudiado música pero no tiene ningún título que lo demuestre y piensa en el conservatorio. Por aquel entonces existía un examen mediante el cual podías obtener el título directamente sin tener que matricularte en el conservatorio, así que decide matricularse para realizar este examen como clarinetista y lo pasa con éxito y a la vez, comienza a estudiar violín en dicho conservatorio. En el año 1959, le conceden una beca para cursar los estudios de violín. Y aunque él ve que tiene más cualidades para el clarinete, los estudios de violín hacen que abandone un poco el clarinete y le dedique más tiempo al violín ya que la beca le proporcionaba una estabilidad económica y no quería perderla.

En esta época estudia violín con el maestro Rogelio Groba y también contrapunto y armonía. También recibe clases de contrapunto y armonía de Alfredo A. de Santiago, primer director de la Banda Municipal de Música de A Coruña, y así comienza su carrera como compositor y su gran labor como arreglista.

Más tarde se casa con María Sánchez, hija de su primer profesor de clarinete, Joaquín Sánchez, que por aquel entonces vivía en Montevideo. Al residir ésta fuera de España, el matrimonio debe hacerse por poderes. Debido a esto, y teniendo en cuenta que en la época los viajes intercontinentales solían realizarse en barco, pasan seis meses desde que la pareja se convierte en matrimonio hasta que finalmente se reúnen en España.

Como veremos más adelante, la música ligera adquiere una gran importancia en la vida de Jose Ramón Sierra Peña, tanto en su tarea como compositor como en su papel de músico. Formó parte de numerosas orquestas de verbena así como de conjuntos musicales como instrumentista tocando en ocasiones el violín, el clarinete o el saxofón hasta los años 90. Además,fue un arreglista prolífico, tarea que combinaba con su labor compositiva.

A comienzos de los años 60, el compositor decide trasladarse a Madrid, lugar en el que toca con varios grupos de música ligera como “Sabor Hit” o “Los Brujos” con los que pasa alrededor de seis años.

 Con su partida a Madrid pierde la beca de estudios y no llega a terminar la carrera de violín.

Cuando regresa a la ciudad de A Coruña, sus suegros habían regresado ya de Montevideo, y es su suegro el que, pensando en un futuro más estable para el joven matrimonio, lo anima para que se prepare para entrar a formar parte de la Banda Municipal de Música de A Coruña, que llevaba en activo desde el veintiséis de julio del año 1948, día en el que da su concierto inaugural dirigida por el maestro bilbaíno Rodrigo Alfredo de Santiago Majo, más conocido como Rodrigo,A de Santiago (Andrade Malde, Julio, 1998). Así que Jose Ramón decide hacer la oposición  como clarinetista y la pasa con éxito.

Esta no era una buena época para la Banda Municipal y los sueldos no eran muy altos y además para formar parte de esta formación tuvo que dejar la orquesta en la que estaba en aquel momento que era la orquesta “Los Españoles”. Para él eso fue un gran bache económico ya que con la orquesta ganaba tanto en un día de actuación como con la banda en todo el mes, y esto no le llegaba para sacar adelante a su familia así que paralelamente a su trabajo en la banda municipal, en ocasiones,  tuvo que trabajar como taxista con un taxi que pertenecía a su suegro. Además en este tiempo de crisis decide formar una orquesta de música ligera a la que da el nombre de “Os Breogáns”.

Entonces las cosas en la Banda Municipal cambian a mejor y se mejoran los sueldos de los funcionarios. En este tiempo, además, el maestro Rogelio Groba decide formar una orquesta con algunos músicos de la banda municipal. Y él pasa a formar parte de ésta, pero esta vez como violinista. Esta fue la Orquesta Municipal de A Coruña, que más tarde se disolvió para formar la Orquesta Sinfónica de Galicia.

Al disolverse la Orquesta Municipal, decide centrarse más en la banda municipal. Él siempre tiene como objetivo avanzar en su carrera como clarinetista así que estudiando todo lo que puede, poco a poco va abriéndose paso en la banda hasta llegar a ser el clarinete solista. Este puesto conllevaba una gran responsabilidad y él intentaba estar siempre en forma para poder defender las obras que tenía que tocar.

Permaneció en el puesto de clarinete solista hasta que la Banda Municipal se quedó sin director. Cuando Rogelio Groba deja de dirigir la formación, se hace cargo de ellaJosé Coba Garrote, subdirector de la Banda Municipal. Además, el ayuntamiento trata de mantenerla trayendo directores invitados, pero, al ser esta solución muy cara, decide buscar una alternativa.  Así Jose Ramón Sierra se ofrece como posible director de la banda y el ayuntamiento lo apoya aunque carecía de título como director. Deja su puesto como clarinete solista y pide que su puesto sea ocupado por Francisco Javier Vidal Suárez, actual clarinete solista de la Banda Municipal que era por entonces un jovencísimo y ya destacado clarinetista en el gremio, recién llegado a la banda.

Esta etapa como director de la banda dura casi dos años hasta que comienza como director Indalecio FernándezGroba, que había dirigido con anterioridad la Banda de Música de Lugo. Entonces, Jose Ramón Sierra vuelve a formar parte de la Banda Municipal como clarinetista pero ahora también como director adjunto, y así permanece hasta los 66 años, edad a la que se jubila.